transéuntes

percepciones devastadas
por percepciones
desinstructivas
a través de las miradas impuras
de una retina adolescente.

Agudización de la visual nocturna
rescatada por los sonidos deformados
de la contingencia estética
las pieles son extrañas
al contacto digital de las llamas
el paladar es rasposo
por la fluidez de la
resina canabica
junto al olfato mórbido
de una nariz alérgica
al polen de lo conocido.

los sentidos secuestrados
por los difusos
prados de información
que avisando
de su extraño norte
hace recordar
el estado inestable
de su caudal.

los límites se vuelven variables
por la aparición
de los causantes júbilos
que ajenos a la transitada
vía de la razón
llega a comportarse temerosa
por su tradicional
cúbica composición

las puertas están enclavadas
por los sobrios sentidos
de un traje inerte
al ser interrumpidos
por disparos emprendidos
por un cuerpo
sin rumbo claro
entregado a la aventura
en donde aparecen
miradas transparentes
que frente a la oscuridad
de un lucero bohemio
su calma realidad
comienza flotar en medio
de un bello desorden
y los atados recuerdos
hacen regenerar
mis fugases argumentos

en una sobredimension del caos

Es un orden incompatible
con el occidente señalado
el colapso es carnal
en una sobre dosis social
por el alcoholismo conservador
y la vegetación abundante

mi emancipación es frustrada
por el liberalismo post mortem
que en la saturación de sus ideas
no deja acercarme
al vacío
del tacto oral
educación dialéctica
pasada de moda.

La música refugiada
en el arte cotidiano
ella-culacion cultural repartida
en los oídos nacientes
adopción maternal
de intenciones sonicas
encarnadas en la tensión viceral
de las cuerdas internas.

Sanción por arroyos florecidos
por el esfuerzo de auto actos
sin ningún otro merito
que no tenerlos
producen la magia
de la suspensión en la e-motivación
para la re figuración
de una vida transformada
en un arte constante y pasajero
con un sin fin de transeúntes